Un patio andaluz

En plena vorágine de exámenes aún encontramos tiempo para la poesía. Convertimos la biblioteca en un patio andaluz y lo llenamos de acordes de guitarra y de palabras hermosas. Estamos ultimando la publicación en nuestro Punto de Partida, que está a puntito de salir. ¡No os lo perdáis!

Puente

Seguimos viajando. De repente el 14 de Febrero nos vimos sobre un puente lleno de amor. ¿Puedes localizarlo? Te daremos algunas pistas: Está en un país donde se habla uno de los idiomas que se estudia en el Gregori Mayans y hay quien cuelga candados en sus barandillas. ¡La respuesta, pronto en el pasillo del segundo piso!

Luces del norte

Llegó el frío y trajo fenómenos extraños. No sabíamos si el primero o los segundos fueron los que nos ponían la piel de gallina. Pero los colores del ventanal eran solo el preludio de lo que iba a suceder...

Para vivir más de cerca las luces del norte, pincha aquí.

Para ir empezando a entender (o si eres de 4º de ESO, para volver a ver el vídeo que viste en clase), pincha en el enlace de abajo. Necesitarás un poco de inglés, aunque las imágenes también te ayudan.

All about auroras

Punto de Partida

Termina el curso con nuestro Punto de Partida número 26. Para los que no les haya llegado todavía por algún motivo, podéis pedírnosla en el colegio. O si alguno lo prefiere o le pilla lejos, puede verla online aquí.

Punto de partida 2018

San Valentín

Diario de viaje

Sigue sin llegar verdaderamente el frío y no vemos días sombríos y tenebrosos como otros años por esta época. El único acontecimiento extraordinario por ahora ha sido el hallazgo de algunas páginas de un antiguo diario que parece ser el diario de un viaje a Transilvania, escrito en inglés por un tal Jonathan Harker. Nuestros equipos están trabajando en la traducción de los fragmentos encontrados. Pronto sabremos más sobre su viaje.

Halloween sin frío

La llegada de Halloween nos encontró todavía en manga corta. No parecía que la primavera perpetua que se había instalado en nuestro ventanal (y fuera) se decidiera a irse. Pero no podía ser... Así que con las primeras nubes el ventanal se vistió de otoño, la rama de nuestro árbol se quedó sin flores y, como correspondía a las festividades de Halloween y de Todos los Santos, descubrimos que bajo la rama habían enterrado a alguien. Poco a poco desaparecieron todos los vestigios de la primavera que aún quedaban en los pasillos. Algunos habitantes animales más propios de la estación llegaron para quedarse al menos un tiempo. Y ahora todas las mañanas vemos pájaros negros, alguna rata, y una lechuza que nos observa atentamente... Tengo la impresión de que de un momento a otro va a pasar algo...